Bolivia: Salar de Uyuni y Camino de la Muerte

06 de marzo: Iniciamos nuestra aventura en el Aeropuerto Juan Santamaría en compañía del coordinador que viajará con el grupo desde Costa Rica. Estaremos volando hasta la ciudad de La Paz donde nos hospedamos en nuestro hotel ubicado en el centro de la ciudad.

07 de marzo: Primero que nada disfrutaremos de un rico desayuno andino que nos dará energía para lo que nos espera este día. A las 11 de la mañana saldremos en compañía de nuestro guía local a conocer los principales atractivos de la ciudad de La Paz.

Iniciamos caminando por el llamado “Mercado de las Brujas”, ubicado a tan solo un par de calles de nuestro hotel, aquí nuestro guía nos explicara sobre las diferentes creencias precolombinas Aymaras que se ponen en manifiesto en este lugar, tales como los diferentes altares a la Pachamama, talismanes, pociones, entre otros. Tendremos tiempo libre para caminar por nuestra cuenta, comprar souvenirs y si se necesita hasta consultar a alguna de las “brujas” sobre alguna poción o talismán para el amor, la suerte o el dinero (nunca esta de más)

Caminaremos por el centro de la ciudad donde visitaremos la Plaza Murillo, donde tiene su sede el gobierno boliviano, la Catedral y el casco viejo de la ciudad, para terminar almorzando en la calle de la Brujas.

El resto de la tarde la tendremos libre para descansar o pasear por nuestra cuenta y por la noche nos juntaremos en el hotel para cenar.

08 de marzo: Nos despertamos temprano para el traslado al aeropuerto localizado en El Ato, La Paz. Tomaremos un vuelo de una hora hasta el pueblo de Uyuni.

Al llegar nos estarán esperando nuestros guías y vehículos 4×4 en los que nos trasladaremos los siguientes tres días mientras recorremos el Salar de Uyuni y los atractivos cercanos. Lo primero en el itinerario será visitar el cementerio de trenes de Uyuni, parada obligatoria para realizar unas espectaculares fotos de las viejas locomotoras que en algún momento significaron gran progreso en Bolivia pero que hoy día tan solo están aquí abandonadas a su suerte. Continuamos con nuestro recorrido visitando el pueblo de Colchani, donde paramos en el mercado artesanal, lugar ideal para comprar cualquier cantidad de souvenirs elaborados de ¿adivinen qué? Si, de sal. Podremos encontrar desde magnetos para las refris y juegos de dados hasta ceniceros y cualquier otra cosa que se nos ocurra.

Nuestra siguiente parada son los montones de sal y los ojos de agua; ya ingresando al Salar de Uyuni. Tendremos el primer contacto con esta basta extensión de más de 10,000 kilómetros cuadrados (para referencia podemos decir que muy similar en tamaño a nuestra provincia de Guanacaste) Como dato interesante también podemos decir que el Salar de Uyuni tiene la mayor reserva de litio en el mundo con un 50-70% del litio mundial e igualmente cuenta con grandes cantidades de potasio, boro y magnesio. La formación del Salar se explica gracias a la evaporación de grandes lagos que cubrían estas áreas hace unos 40,000 años (Lagos Minchin y Tauca)

Podremos tomar las primeras fotografías en el salar antes de regresar al pueblo de Uyuni, donde tendremos una rica cena en nuestro hotel y tiempo para acostarnos temprano y descansar.

09 de marzo: Saldremos muy temprano de Uyuni para aprovechar el día. Nuestra primera parada será el Valle de Rocas, donde podremos encontrarse rocas enormes a las que la erosión causada por el viento, le dio formas sorprendentes. Será un lugar para tomar muy buenas fotos. Continuamos para visitar algunos geiseres y aguas termales naturales ya dentro del Parque Nacional Eduardo Avaroa, muy cerca de la frontera con Chile.

Nuestra siguiente parada es la Laguna Colorada, sitio donde estaremos almorzando en medio de un paisaje que parece sacado de otro mundo. La coloración roja de sus aguas es debida a los sedimentos del color rojo y pigmentos de algunos tipos de algas.

Pero no siempre tiene el mismo color, pues la variación de las características de sus aguas así como la luz según el momento del día y el clima le confieren tonos diferentes que van de marrones hasta rojos intensos. La laguna tiene una superficie de 54 km2 y una profundidad promedio de 35 centímetros, por lo que es habitual observar distintas aves posadas en su fondo. Es un lugar de cría para los flamencos andinos, aves migratorias que se juntan en grandes cantidades en estas aguas ricas en minerales, ofreciendo una de las postales más bonitas de la laguna. También es común observar llamas y alpacas alrededor de la Laguna.

Después del almuerzo regresamos a nuestros vehículos para seguir con el recorrido, donde nos esperan algunos puntos de interés más tales como el Desierto del Siloli donde se encuentra el famoso Árbol de Piedra y también el mirador a la Montaña de Siete Colores.

Nuestro día finaliza al lado de la Laguna Hedionda (el que la llamo así no llego al curso de mercadeo :/ ); es otra laguna salada de color rojizo donde también abundan los flamencos y debe su nombre al olor a azufre. Aquí pasaremos la noche en un ecolodge ubicado al lado de la Laguna, donde el canto de los innumerables flamencos crean un ambiente natural inimaginable. Descansaremos y pasaremos la noche en medio de una paz absoluta. Les garantizamos una de las noches más inolvidables de cualquier viaje en uno de los lugares más aislados del mundo.

10 de marzo: Nuevamente salimos muy temprano con la intención de apreciar un amanecer único en la entrada del Salar de Uyuni.

El amanecer en el Salar de Uyuni perfectamente se podría considerar una de las experiencias mas marcianas que se pueden vivir en cualquier viaje. El cielo de color rosa, detrás de las montañas que encierran el Salar, anuncia la inminente salida del sol, que llega para calentarnos, porque a esa altura -3.700 metros- la mañana es muy fría, sobre todo cuando el viento helado empieza a soplar. Los rayos iluminan el mar de sal para darle un ambiente casi lunar al entorno.

Nos quedaremos un rato aquí disfrutando de la primera hora de la mañana y haciendo todo tipo de fotografía que nuestra imaginación nos permita. En el Salar no hay límites, el agua forma espejos y cualquier objeto e idea se pueden transformar en la foto de la vida.

Seguimos y la siguiente parada es la Isla Incahuasi, donde podemos hacer el recorrido y ver los milenarios cactus gigantes y apreciar la inmensidad del Salar de Uyuni. Vale la pena subir hasta el mirador dejándose impresionar por los cactus que alcanzan una altura de hasta 10 metros y que agregan aún más surrealismo al entorno.

Luego de la visita a la Isla continuamos hasta otro ecolodge ubicado a las orillas del Salar y al pie del volcán Thunapa (3600 msnm)

11 de marzo: De vuelta a los vehículos atravesaremos el Salar de regreso a la ciudad de Uyuni, no sin antes hacer unas cuantas paradas más para tomar fotos en perspectiva valiéndonos de los reflejos y la inmensidad del Salar. Nuestra última parada del día será el Museo de Sal que se ubica en medio del Desierto. En realidad el Museo era antiguamente un Hotel de Sal, pero luego se prohibieron los hoteles dentro del Salar y ahora es solo un Museo donde los grupos que visitan el Salar paran a almorzar y descansar. Hacía la mitad de la tarde estaremos llegando nuevamente a Uyuni donde pasaremos la noche.

12 de marzo: Por la mañana estaremos tomando nuestro vuelo de regreso a La Paz, a donde llegaremos a eso del mediodía y tendremos la tarde libre para explorar un poco más de la ciudad por cuenta propia.

13 de marzo: Hoy tendremos nuestro primer recorrido en bicicleta en Bolivia; nada más y nada menos que el mundialmente famoso Camino de la Muerte. Este camino conecta La Paz con la región de Los Yungas (Amazonia) y es célebre por su peligro extremo y el número de muertes en accidentes de tránsito al año, (un promedio de 209 accidentes y 96 personas muertas al año). En 1995 el Banco Interamericano de Desarrollo lo bautizó como el camino más peligroso del mundo y desde ahí el morbo ha venido en aumento, con decenas de programas y documentales de televisión y cientos de ciclistas que buscan recorrerlo. La realidad es que hoy en día el camino ya no es tan peligroso como el pasado, principalmente por la apertura de una nueva carretera por donde circula todo el transito de camiones, autobuses y autos; dejando el viejo camino para uso casi exclusivo de los ciclistas de montaña que viajan hasta aquí deseosos de probar sus nervios.

Nuestro día inicia con el desayuno en nuestro hotel. Desde aquí tenemos un traslado de mas o menos una hora y media hasta La Cumbre (4,700 msnm), donde tendremos fantásticas vistas de varios picos nevados, incluyendo Huayna Potosí (6,088 msnm). Nuestros guías profesionales nos darán todas las instrucciones de seguridad y nos entregarán el equipo y las bicicletas. Desde aquí descendemos primero por un camino asfaltado entre picos de montañas, llamas y alpacas y pequeños pueblos. Nos detenemos para tomar un refrigerio, tomar fotos y descansar en el camino, lo mejor para darnos tiempo para disfrutar del paisaje: acantilados imponentes y vegetación cada vez más verde. Después de un refrigerio descendemos más y entramos en la jungla y en la parte más desafiante del recorrido.

Este infame camino de tierra angosto se corta precariamente en el lado de la montaña y desciende cerca de 2,000 metros. Con precipicios de hasta 800 metros de caída a nuestra izquierda y grandes salientes de roca y cascadas a nuestra derecha, avanzamos a través de la niebla, las nubes bajas y el polvo. Iremos haciendo paradas a lo largo del descenso para que nuestros guías profesionales nos expliquen lo que nos espera en cada curva del camino.

A medida que nos acercamos al final del recorrido, se pone progresivamente más caliente y polvoriento. Para cuando llegamos al final en Yolosa (1.100 m) estaremos cansados, calientes, sucios y eufóricos. Pasando Yolosa llegaremos a nuestro destino final donde disfrutamos de un almuerzo buffet, admiramos el magnífico paisaje, pasamos tiempo relajándonos en la piscina e incluso celebramos con alguna cerveza.

El recorrido en bicicleta este día es de 60 kilómetros. Hacía el final de la tarde estaremos tomando nuestro transporte de regreso hasta La Paz, a donde llegaremos a tiempo para cenar.

14 de marzo: Nos espera nuestro segundo recorrido en bicicleta. Hoy iremos más alto y tendremos un descenso mucho mayor que el día anterior.

Este día disfrutaremos de un ride increíble y emocionante que involucra gran altitud, nieve, caminos de lastre, glaciares, caídas de agua fantásticas y, finalmente de nuevo la caliente selva del Amazonas. Este viaje incluye una visita a Chacaltaya, la pista de esquí más alta del mundo a 5.345 metros sobre el nivel del mar. Después de conducir hasta la pista de esquí descargamos las bicicletas y tenemos tiempo para tomar un aperitivo, maravillarse con la pista de esquí y disfrutar de las espectaculares vistas de las montañas de los Andes: Illimani, Mururata y Huayna Potosí. Desde la estación de esquí, bajaremos por la carretera de acceso al campo de esquí de Chacaltaya y luego nos desviaremos para unirnos a la carretera de Milluni a Zongo. Una vez que nos hemos unido a este camino de lastre, nos conducen a través de una sección ondulada antes de llegar al paso Zongo.

En el paso Zongo (el punto de acceso para los que suben a Huayna Potosí) podemos descansar y disfrutar de las vistas antes de continuar nuestro recorrido. Desde el Paso Zongo (4.780 m) descendemos rápidamente por este camino de lastre de retroceso hacia la jungla. A medida que descendemos, la temperatura aumenta y el paisaje se vuelve cada vez más verde y exuberante. Podemos andar en bicicleta todo el tiempo que desee por este camino que lentamente se aplana cuanto más nos adentramos en la jungla. El punto más bajo que alcanzamos es el pueblo de Zongo, ubicado a 1,000msnm donde podemos celebrar la finalización de nuestro recorrido con una perdida de altitud de 4,300m. La distancia de este día es de 70 kilómetros.

Estaremos almorzando y regresando a La Paz, donde tendremos algún tiempo para descansar y cerrar este viaje con una cena de despedida en el centro histórico de la ciudad.

15 de marzo: Nos trasladamos temprano hacía el Aeropuerto en El Alto para tomar nuestro vuelo de regreso a Costa Rica, con la sonrisa llena por todos los recuerdos que nos dejó este inolvidable viaje.

IMPORTANTE: El itinerario se encuentra sujeto a cambios por razones logísticas.